David Bisbal volvió a sellar anoche en el Palacio Euskalduna de Bilbao su particular pasaporte musical para viajar por la cuarta dimensión, revisando en formato acústico las mejores canciones que le han acompañado durante estos primeros once años de carrera en solitario. Ayer, un total de 2.164 espectadores abarrotaron todas las localidades el patio de butacas del Auditórium, en el corazón de este singular edificio que emerge poderosamente como un buque en permanente construcción en memoria del antiguo astillero que le da nombre a orillas de la ría del Nervión. Un lleno absoluto que traspasó fronteras gracias a la transmisión en streaming realizada en colaboración con LKXA, patrocinador del concierto en Bilbao, y que aumentó la audiencia a través de internet en miles de seguidores alrededor del mundo. Casi dos años después, David Bisbal regresaba al Euskalduna, coincidiendo en el “rush final” de la gira acústica más importante de un artista latino en los últimos tiempos.
Una formación de lujo de doce músicos acompañó a David Bisbal sobre uno de los escenarios más grandes de toda Europa, en una travesía de veinticuatro canciones que arrancó a golpe de guitarra flamenca con “Almería, tierra noble”, seguida de “El ruido”, y de la incursión en el cancionero popular latinoamericano de los años 40’s, con “Te quiero dijiste” de María Grever, “una de las grandes compositoras mexicanas de todos los tiempos, autora de más de ochocientas canciones”. Minutos más tarde, llegaba el turno de “Lloraré las penas”, con nuevos arreglos, “Esta ausencia”, “En un rincón del alma”, de Alberto Cortez, “Doy la vida”, “Sombra y luz” o “24 horas”, de Espinoza Paz. Tras el cambio, David Bisbal interpretó la nueva adaptación de su histórico primer single, “Ave María”, “Adoro”, acompañado sólo por el piano de cola de su director musical, el bilbaíno Pedro Hoyuelos junto al sexteto de cuerdas de la OCAL, y “Lucía”, de Joan Manuel Serrat, con Juan Sánchez, guitarra flamenca, y Juan Carlos Jiménez, guitarra de jazz. Los nuevos arreglos “muy cabaret” de “Dígale”, con el solo de trombón del cubano Julio Montalvo, y el homenaje al rock andaluz de los años 80’s con “Luna”, del grupo Alameda, se da la mano con “Al-Andalus”, con el batería de la banda, David Simó, en el cajón, el acordeón de Hoyuelos y el contrabajo acústico de Jordi Portaz. El repertorio enfiló la última media hora con “Quién me iba a decir”, “Sin mirar atrás”, “Silencio”, y con tres bises de gran altura, “Y si fuera ella”, de Alejandro Sanz, “Mi princesa” y “Esclavo de sus besos”.
David Bisbal hizo varias referencias a lo largo del concierto al inminente cierre de su gira acústica en España con las próximas citas del 2 y 9 de febrero en el Palau Sant Jordi de Barcelona y el Palacio de los Deportes de Madrid, respectivamente, para poner rumbo transoceánico a partir del 1 de marzo, con el Tour Acústico USA y Canadá, con once conciertos que arrancan en Washington. Unas semanas más tarde, el 20 de marzo, la gira acústica se despedirá también del público argentino en el Luna Park de Buenos Aires.
Una formación de lujo de doce músicos acompañó a David Bisbal sobre uno de los escenarios más grandes de toda Europa, en una travesía de veinticuatro canciones que arrancó a golpe de guitarra flamenca con “Almería, tierra noble”, seguida de “El ruido”, y de la incursión en el cancionero popular latinoamericano de los años 40’s, con “Te quiero dijiste” de María Grever, “una de las grandes compositoras mexicanas de todos los tiempos, autora de más de ochocientas canciones”. Minutos más tarde, llegaba el turno de “Lloraré las penas”, con nuevos arreglos, “Esta ausencia”, “En un rincón del alma”, de Alberto Cortez, “Doy la vida”, “Sombra y luz” o “24 horas”, de Espinoza Paz. Tras el cambio, David Bisbal interpretó la nueva adaptación de su histórico primer single, “Ave María”, “Adoro”, acompañado sólo por el piano de cola de su director musical, el bilbaíno Pedro Hoyuelos junto al sexteto de cuerdas de la OCAL, y “Lucía”, de Joan Manuel Serrat, con Juan Sánchez, guitarra flamenca, y Juan Carlos Jiménez, guitarra de jazz. Los nuevos arreglos “muy cabaret” de “Dígale”, con el solo de trombón del cubano Julio Montalvo, y el homenaje al rock andaluz de los años 80’s con “Luna”, del grupo Alameda, se da la mano con “Al-Andalus”, con el batería de la banda, David Simó, en el cajón, el acordeón de Hoyuelos y el contrabajo acústico de Jordi Portaz. El repertorio enfiló la última media hora con “Quién me iba a decir”, “Sin mirar atrás”, “Silencio”, y con tres bises de gran altura, “Y si fuera ella”, de Alejandro Sanz, “Mi princesa” y “Esclavo de sus besos”.
David Bisbal hizo varias referencias a lo largo del concierto al inminente cierre de su gira acústica en España con las próximas citas del 2 y 9 de febrero en el Palau Sant Jordi de Barcelona y el Palacio de los Deportes de Madrid, respectivamente, para poner rumbo transoceánico a partir del 1 de marzo, con el Tour Acústico USA y Canadá, con once conciertos que arrancan en Washington. Unas semanas más tarde, el 20 de marzo, la gira acústica se despedirá también del público argentino en el Luna Park de Buenos Aires.
Fuente: www.davidbisbal.com
Información Fin de Gira Acústica en España y venta de entradas: Barcelona y Madrid www.davidbisbal.com y en www.bisbalpress.info
... acompáñame en el viaje que volar solo no puedo
